domingo, 27 de enero de 2013

PRIMERAS MORADAS ( 2 CAPÍTULOS)

Teresa comienza presentándonos los protogonistas,Dios y la persona,que se encuentra en el trato personal,la oración.Nos los presenta como un creyente que se encuentra ya en la culminación del proceso.Luego con un conocimiento experiencial extraordinario, y muy bien reflexionado,para que lector,que empieza el camino sepa,por el testimonio de otro,cómo debes situarse desde el principio;qué Dios,qué persona,qué encuentro entre dos. se cominenza el camino por el dicho de otro,conocimiento de "oídas".Pasará a ser experiencia personal,por "visión""ahora te han visto mis ojos".
 La palabra del otro acompaña la aventura personal.
El lector se encuentra desde  la primera palabra con una imagen de sí mismo que tal vez le sorprenda por lo grandiosa"nuestra alma"es como un castillo todo de un diamante  o muy puro cristal, donde hay muchos aposentos...un paraíso donde dice él (Dios)tiene todos sus deleites"(1,1).La hermosura ""la gran capacidad""la gran dignidad"de la persona(1,1)¡Un verdadero misterio que escapa a nuestro conocimiento! .Somos interlocutores de Dios por naturaleza:"de natural tan rica (la persona)y poder tener conversación no menos que con Dios"(1,6).
Insiste con vigor sobre "el propio conocimiento",por fidelidad a su fe y a sus experiencia  cristiana,y porque ve a su alrededor una desviación seria al repecto.Lo introduce con la frase ya citada:"Jamás nos acabamos de conocer si no procuramos conocer a Dios"(2,9),es decir,lo que Dios obra en nosotros.Sobre este fondo se entiende,presenta dos maneras de entender el propio conocimiento. Primera:conociendo la acción de Dios en nosotros,"Nuestro entendimiento y voluntad se hace más noble y más aparejado para todo bien".Y segunda:"Si nunca salimos de nuestro cieno de miserias,es mcho inconveniente".Lo que generará "temores,pusilanimidad y corbardía"(2,10)
Continúa con la tipificación de esta "humildad falsa""Todo esto les parece humildad".Lo que significa que "No acabamos de entendernos:tuerce el propio conocimiento"(2,8).Teresa insta a poner los ojos en Cristo,pues "allí aprenderemos la verdadera humildad"(2,11)Recuerda que,en su condición de escritora,viene librando desde hace esta batalla:"el daño que nos hace no entender bien esto de la humildad y propio conocimiento"(2,13).

DIOS
En el propio conocimiento está implicada, y muy seriamente,nuestra imagen de Dios.El escrito teresiano apunta con decisión a esto.Nos apremia a prestar atención a a comparación del castillo porque "quizá sera de Dios servido pueda por ella daros ago entender de las mercedes que Diso es servido hacer a las almas"(1,3).Nos abre el entorno teológico en que se mueve:que sepan"que es posible"que Dios e comunique ,que no hará (daño)ver que es posible en este destierro comunicarse un tangran Dios"(1,3).Insiste referiéndose a algunos teólogos:"Podráse decir que parecen cosas imposibles y que es bien no encandalizar a los flacos"(1,4).Quien no crea en este Dios lo niega,porque "pone tasa a sus obras",Y se condena a no "conocerlo" por experiencia (1,4).Su fórmula:creer para ver por experiencia,creer en este Dios que obra"porque se conozca su grandeza"(1,3)para darse a conocer.La persona se degrada,se disminuye cuando no se abre a este Dios.

LA ORACIÓN
Es la escuela en que se aprende el verdadero conocimiento,de Dios y de sí mismo:"La puerta para entrar en este castillo es la oración"(1,7)Entiéndase para entrar en el conocimiento,para descubrir la verdader de Dios y de la persona.
Los otros pueden darnos"información"de Dios y de nosotros.Pero esto no nos saca de nuestras indigencia y pobreza.
Sólo el trato personal nos da el conocimiento de "conformación",configurador de nuestra identidad.
De aquí nace la apremiante llamada teresiana a "entrar "a, hacer el viaje al interior,que nos es perderseen un intimismo suicida,sino ir hacia al otro,Dios,y el otro,yo mismo,que no me descubro sino en la medida que me dejo "alterar"por otro-otro que interrumpe en mi espacio vita.Llamada tanto más apremiante cuanto nuestra situación histórica es de "exilio",de enajenación,"almas mostradas (acostumbradas)a estar en cosas exteriores".De estas personas dice que son "como una estatua de sal"(1,6)"mudos que no oyen"(2M 1,2)Total incominicación."Una gran bestialidad"(1,2)Nos ofrece una imagen de estas personas "derramadas"en blanco y negro.Y aconseja con un enorme respeto a cada persona en su vocación concreta"procure dar de mano a las cosas y negocios no necesarios,cada uno conforme a su estado"(2,14).
Con este consejo conecta el de centrarse en lo esencial:la relación interpersonal con Dios y los hermanos,el amor en la doble,unitaria dirección.Esta "es perfección verdadera".Lo demás no pasa de ser "medio"para esto(2,17).Sin está decisión es imposible avanzar en el camino de interiorización,de personalización.

CRISTO
cristo emerge desde el principio:"Pongamos los ojos en Cristo,nuestro bien y allí aprederemos la verdadera humildad"(2,11),o verdadera verdad:soy hijo en el hijo,en él agraciado con toda gracia.Gracia de relación con el padre en el Espíritu.Esta exhortación aclara y precisa las más "abstracta",impersonal,aunque cuajada de sentido:"poned los ojos,en el centro,que es la pieza o palacio adonde está el rey"(2,8);Cristo es el centro,el núcleo de la revelación de Dios y de la nueva criatura,en quién  toda verdad alcanza su plenitud absoluta.
 SINTESIS  (P.MAXIMILIANO HERRAIZ.)



STA TERESA DE JESUS

LIBRO DE LAS MORADAS
            
            CASTILLO INTERIOR

Contenido:

Historia de una relación interpersonal,hasta la comunión más íntima,la semejanza más completa,semejanza y unión de amor,entre Dios "y la única criatura a la que Dios amó por sí misma".La alianza biblica.Presentación en movimiento de la vocación nativa de la persona,a luz de misterio del hijo de Dios,Jesús,quien el Padre nos dio,y quien  le respondio con totalidad,fiialmente:Cristo"divino y humano junto"(6M 7,9),Nuestro referente esencial,único.
(Maximiiano Herraiz .ocd)

Desde el símbolo del "castillo" se e dice al lector que cada hombre es como un castillo ;que lo interior del castillo es el alma;que la puerta de ingreso es la oración.
Los primeros pasos de la oración:conocerse a si mismo,tomar conciencia de la propia dignidad, desarrollar el sentido de Dios y el sentido del pecado,recuperar la sencibiidad espiritual.Cuidar a propia interiroridad.
Desde la imaginería bíblica,el hombre de Las primeras moradas,liberado ya del pecado,está como Pablo o la Magdalena recién convertidos;como el ciego del nacimiento o el paralítico de Siloé que ha recuperado la vista o el movimiento,antes atrofiados.Pero,como la mujer de Lot,en riesgo permanente de volver la mirada atrás y petrificarse.(Tomás ÁlvaREZ)