domingo, 30 de noviembre de 2008

Decir Carmelo es...,

Decir Carmelo
es decir Oración,Gracias a estas Vocaciones, la Iglesia Peregrina se une al coro de la Iglesia Triunfante y así,en el cielo y la Tierra no cesa la alabanza al Señor.Decir Carmelo es decir María,El silencio de María, su trabajo humilde, su vida simple, su servicio, su contemplacion continua del Señor.Decir Carmelo es decir Casa Habitada...Señor Eucaristia como centro de ella, Buen Pastor, al frente de su Grey; es decir, Tienda en el Desierto, Pequeña Fortaleza Amurallada, Casa de Dios y Puerta del Cielo...

Decir Carmelo es decir sencilla Fraternidad...El mundo necesita sin saberlo, la libertad que se repira en estos claustros, el mundo de hoy, precisa encontrar estos descansos, para tantas inútiles fatigas y de sus ruidosas y vacuas existencias.

El mundo necesita esta presencia, tan silenciosa y abnegada, de estas vidas escondidas en Dios...Tratemos de entrar en las Casas de Teresa, entremos en sus Palomarcicos...queda abierto el portón.Una luz siempre antigua y siempre nueva, llega a nosotros...Hacia ellos somos atraídos...¡No es posible resistirse!Nos llama a entrar...¡Venid y ved!

Celebremos 1 domigo de Adviento


"El misterio de Adviento es un misterio de vaciamiento, de pobreza, de limitación. Debe ser así. De otro modo no podría ser un misterio de esperanza. El misterio de Adviento es un misterio de comienzo: pero también es el misterio de un fin. La plenitud del tiempo es el final de todo lo que todavía estaba incompleto, todo lo que todavía era parcial. Es el cumplimiento en unidad de todo lo que era fragmentario.


".Thomas Merton.Thomas MertonThomas Merton

Desde este punto de vista, el Adviento es más adecuado que nunca para convertirse en un tiempo vivido en comunión con todos aquellos --y gracias a Dios son muchos—que esperan en un mundo más justo y más fraterno.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Agradecemos la visita de los jóvenes de castellón


Quiero agradecer la visita a nuestro monasterio el domingo de Cristo Rey a los jóvenes de la parroquia de Castellón, para ellos nuestro agradeciemiento y nuestra oración de cada día, para que sean fieles en la fe .y fuerte para seguid anunciando la palabra de Dios sin miedo, pues sois la luz del mundo.
Gracias por los momentos compartidos en comunidad. adelante a seguir viviendo esta experiencia del amor de Dios.

martes, 25 de noviembre de 2008

Ser Totalmente de Dios

Entregarse a Él y a su servicio por amor, es la vocación, no sólo de algunos elegidos, sino de todo cristiano: consagrado o no, hombre o mujer Todos son llamados a seguir a Cristo.
Y cuanto más se avanza por este camino, más se hace semejante a Cristo, y puesto que Cristo personifica el ideal de la perfección humana, -libre de toda mancha, rica de caracteres masculinos y femeninos, libre de toda limitación terrenal, sus seguidores fieles son elevados por encima de los confines naturales.
Por eso encontramos en hombres santos una bondad y una ternura femenina una solicitud verdaderamente maternal por las almas confiadas a ellos; y en mujeres santas una audacia y una disponibilidad y decisión auténticamente masculinas.

De este modo el seguimiento de Cristo conlleva el desarrollo en plenitud de la vocación originaria del hombre: ser autentica imagen de Dios; imagen del Señor de lo creado, conservando, protegiendo y haciendo crecer a toda criatura que se encuentre en su ambiente; imagen del Padre, generando y educando por paternidad y maternidad espiritual- hijos para el reino de Dios.

(Ser finito y ser eterno)

EDITH STEIN (Sta. Teresa Benedicta de la Cruz)

Carmelita Descalza

viernes, 14 de noviembre de 2008

Si me preguntaran por el secreto de la felicidad..

Si me preguntaran por el secreto de la felicidad, diría que consiste en desentenderse de nosotros mismos, en negarse constantemente.
He aquí un método eficaz para vencer el orgullo: matarlo de hambre. Mira, el orgullo es amor propio. Pues bien; el amor de Dios debe ser tan fuerte que anule por completo nuestro amor propio.
San Agustín dice que existen en nosotros dos ciudades: la ciudad de Dios y la mía. Cuanto más crezca la primera más disminuirá la segunda. Un alma que viva de fe, bajo la mirada de Dios, que posea aquel ojo puro de que habla Cristo en el Evangelio (Mt. 6, 22) es decir, esa pureza de intención que sólo ve a Dios en todas las cosas, esa alma vivirá también en humildad y reconocerá los dones que ha recibido porque la humildad es la verdad.

El alma nada se apropia. Todo se lo atribuye a Dios como hacía la Santísima Virgen.
Coloca entonces tu miseria como María Magdalena a los pies del divino Maestro y suplicale que te libre de ella. ¡Le agrada tanto ver que un alma reconoce su fragilidad! En ese momento,
como decía una gran santa, el abismo de la inmensidad de Dios se encuentra frente por frente del abismo de la nada de la criatura y Dios abraza esa nada.
Querida, no es orgullo pensar que no te gusta la vida fácil. Pienso ciertamente que Dios quiere que tu vida se desarrolle en una atmósfera donde se respire aire divino. Mira, me causan profunda compasión las almas que no saben vivir por encima de este mundo y de las cosas superficiales. Viven
esclavizadas y quisiera decirles: Sacudid el yugo que os oprime. ¿Por qué no rompéis esos lazos que os tienen prisioneras y os sujetan a cosas que valen menos que vosotras?.
Sólo poseen la felicidad en este mundo los que, despreciándose y olvidándose de sí, eligieron
la cruz por herencia. Qué dulce paz reina en el alma cuando busca su alegría en el dolor.
...Para conseguir el ideal del alma es necesario vivir vida sobrenatural. Es decir no debemos obrar nunca naturalmente.
Hay que ser conscientes de que Dios mora en nuestro interior y que hay que realizar con Él todas las cosas. Dejamos de ser entonces superficiales, incluso en nuestras acciones más ordinarias, porque nuestra vida ya no está inmersa en ellas.
Las supera. Un alma sobrenatural no trata nunca con las causas segundas sino solamente con Dios. Entonces, su vida se simplifica, se asemeja a la vida de los Bienaventurados, se libera de sí misma y de todas las cosas. Para ella todo se reduce a la unidad, a ese único necesario de que hablaba el divino Maestro a la Magdalena (Lc. 10, 42).
Es un alma realmente grande y libre porque tiene su voluntad inmersa en la voluntad divina.
(Sor Isabel de la Trinidad)
Carta a Francisca Sourdon

martes, 4 de noviembre de 2008

sábado, 1 de noviembre de 2008